Abogados de Impericia Dental de New York
Mientras que muchos de nosotros tenemos cierta ansiedad al acudir al dentista, sabemos también que los dentistas son profesionales que cuentan con extensivo entrenamiento y preparación con años de experiencia de estudio y experiencia práctica. Desafortunadamente, este entrenamiento no es siempre una protección confiable en contra de serias heridas físicas. Algunos dentistas son negligentes, descuidados, o temerarios en la realización de sus responsabilidades médicas, y otros podrían no estar apropiadamente cualificados para trabajar en pacientes. Si fue seriamente herido por los errores de un dentista, o si un ser querido fallecido debido a la recepción de un cuidado dental negligente, podría tener derecho a recibir una compensación por su dolor, sufrimiento y pérdidas.
En Sullivan & Galleshaw, apoyamos a nuestros clientes con más de 16 años de experiencia práctica manejando una amplia variedad de reclamaciones de impericia. Estamos comprometidos con proveer una representación legal agresiva para los residentes de la Ciudad de New York, y ofrecer consultas gratuitas y confidenciales para nuevos clientes. Para comenzar a discutir su reclamación y posibles opciones legales en adelante, llame a nuestros abogados de impericia dental de New York al (718) 843-0300.
¿Qué Es Una Impericia Dental?
Si está pensando en presentar una reclamación, es importante que comprenda lo que es una impericia dental, y qué no lo es. A fin de resultar exitoso desde el punto de vista legal, las reclamaciones de impericia dental deben involucrar los siguientes cuatro elementos:
- Una relación paciente-dentista formal debe haber existido. Esto establece que el dentista (o asistente dental, anestesiólogo, etc.) debía un deber de cuidado al demandante como su paciente.
- El dentista cometió un error ineludible, y por tanto incumplió con el deber de cuidado mencionado anteriormente. El dentista pudo ser olvidadizo, descuidado, temerario, o totalmente no apto para practicar. El error que él o ella cometió debe haber sido razonablemente previsible y prevenible por otro dentista actuando bajo las mismas circunstancias.
- El demandante debe haber sufrido una seria herida, conocida como daños.
- La herida debe haber sido causada por la negligencia del dentista o conducta errónea, conocida como causación.
Mientras que tener un mal resultado luego de un procedimiento es siempre exasperante y desagradable, la impericia no puede ser verdaderamente alegada a menos que el dentista haya cometido en si un error. Si el dentista no cometió errores y actuó en sus responsabilidades de manera adecuada, él o ella no pueden ser sujetos responsables por un pobre resultado, aún cuando dicho resultado sea un dolor severo. Dicho esto, si sospecha que su dolor es causado por la culpa de un error, debe consultar con un abogado inmediatamente.
De hecho, no solo es prudente consultar con un abogado inmediatamente – es críticamente importante. Una fecha de vencimiento estricta conocida como el estatuto de limitación restringe la cantidad de tiempo que usted tiene para presentar una reclamación por impericia médica a solamente dos años y medio, y si pierde dicha fecha límite, su reclamación no será considerada válida y quedará desprovisto de un recurso legal posterior.
Ejemplos Comunes de Impericia Dental
Ya que hemos cubierto los elementos básicos comunes a todos los casos de impericia, ¿Cuáles son algunos ejemplos más específicos de acciones que podrían ser consideradas como negligentes?:
- Atrasar innecesariamente un tratamiento sin razones médicas válidas para el atraso.
- Fallar en obtener el historial médico de un paciente, resultando en problemas como interacciones peligrosas de medicamentos o complicaciones prevenibles relacionadas a una enfermedad.
- Fallar en darse cuenta de una condición oral y diagnosticarla, como una lesión, enfermedad de la encía, infecciones, o cáncer en etapa temprana.
- Cometer un error relacionado a una corona, puente, canal de raíz, extracción, u otro procedimiento. Un desempeño oral pobremente ejecutado puede aflojarse, agrietarse, caerse, o infectarse, necesitando procedimientos adicionales y gastos mientras se somete a la víctima a un dolor y sufrimiento de otra manera prevenible.
- Cometer errores de anestesia, como permitir que el paciente permanezca sedado por un periodo de tiempo extenso, o fallar en observar el monitor de nivel de oxígeno durante la sedación.
- Remover el diente equivocado, o fallar en remover un diente que requiere una extracción.
Aunque raros, algunos casos de impericia extrema puede ir mas allá causando una herida que puede causar la muerte injusta de un paciente. Muchas muertes que resultan de un cuidado dental son atribuidas a el uso inapropiado de anestesia, con niños y adolescentes siendo principalmente vulnerables. En muchos casos las muertes relacionadas a la anestesia son causadas por pacientes que aspiran vómito, o se sofocan luego de que un diente u objeto bloquea las vías respiratorias del paciente. Al menos 45 niños han fallecido por recibir un cuidado dental negligente desde el 1974, o cerca de un niño por año.
En otros casos el dentista podría simplemente no estar cualificado para practicar en pacientes. En New York, todos los dentistas practicantes deben estar formalmente licenciados. El Título 8, Artículo 133, Sección 6604 de las Guías de Educación del Estado de New York delinean los requerimientos de licencia de New York en detalle, con algunos de los criterios bajo la § 6604 incluyendo:
- Un grado doctoral de dentista
- Pasar un examen escrito
- Tener al menos 21 años de edad
Si sospecha que su dentista está licenciado inapropiadamente o cometió un error, y fue usted seriamente herido como resultado de ello, podría ser elegible para compensación financiera. Para concertar una evaluación de caso gratuita y confidencial, llame a los abogados de impericia dental de New York de Sullivan & Galleshaw al (718) 843-0300 hoy.